Desgasificación y desecación
La desgasificación es el proceso por el que se separan gases disueltos en líquidos, un proceso fundamental en aplicaciones en las que los gases pueden afectar al resultado final. La desecación, sin embargo, sirve para eliminar la humedad de los sólidos o para mantener un entorno seco en aquellos materiales sensibles a la humedad. Ambos procesos requieren un desecador de vacío y una bomba para generar el vacío necesario.
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Desgasificación y desecación
La desgasificación es fundamental en aplicaciones como la HPLC y las reacciones orgánicas. También es esencial en la fabricación de resinas, geles, plásticos y cosméticos. Un sistema de desgasificación por vacío está formado por un desecador con un recipiente para el líquido y una bomba de vacío para regular la presión interior. El caudal de la bomba y la intensidad del vacío a su vez varían en función de la aplicación.
La desecación es el proceso por el que se elimina la humedad de los sólidos o se mantiene un entorno seco en aquellos materiales sensibles a la humedad. Un desecador de vacío conectado a una bomba de vacío de laboratorio elimina la humedad y el aire de la cámara, siendo la solución ideal para almacenar materiales sin polvo y completamente secos.
